sábado, 13 de noviembre de 2010

El emperador de Austria y Hungría

Es lo menos que se puede hacer en un día como hoy, ¿no?, un día, una mañana bastante triste porque si nos ha dejado últimamente gente como Alexandre o López Vázquez, ahora se nos va Berlanga, Don Luis García Berlanga, que tantas veces les dirigió, por cierto. Es lo menos recordar la figura del que tengo votadas en Filmaffinity como obras maestras un buen número de sus películas, por ejemplo Plácido. Pero también El verdugo, Bienvenido Mr. Marshall. O Calabuch.

Supongo que allá donde se haya reunido con Alexandre, con López Vázquez o con Agustín González, se habrá armado una de Berlanga discutiendo entre ellos (¿con Él?) para ver si se puede pasar, no que no son horas y todos están durmiendo, venga usted mañana, fetichista. Bien podría ser, en efecto, una escena de Plácido.

El Imperio Austro-húngaro se ha quedado sin su emperador, sin su embajador más célebre. Hoy ha muerto Don Luis García Berlanga. Jode, en verdad, morirse, Don Luis, jode más que el dolor el morir.

6 comentarios:

Alberto Ramos dijo...

Sí que jode.

josé miguel dijo...

Las palabras saldrán mañana impresas en el suplemento XLSemanal, justo un día después de su muerte. Habrá que leer las últimas palabras, la última entrevista del genio.

ZoePé dijo...

Esta fue la noticia del desayuno, hoy.
Una pena.
Que descanse Don Luis.
Un beso.

josé miguel dijo...

Que descanse, en efecto, Zoe, nos hemos quedado huérfanos.

Un beso.

Esther dijo...

Pues no me había enterado hasta ahora. Qué pena me da que Berlanga uno de los mejores directores españoles haya fallecido.

Un fuerte abrazo, José!

josé miguel dijo...

Así es, Esther, falleció en la madrugada del domingo y por la mañana todos nos despertamos con esa noticia. Ha dicho Almodóvar una gran verdad al decir que si tu paisano hubiera rodado en inglés, todo el mundo estaría hoy postrado ante su tumba.

Besicos, Esther.