Judy is waiting
Hay que sumar doce días a los doce que llevamos de diciembre para comenzar a decir merry christmas y happy new year. Antes suena a comercial y a Corte Inglés. Finamente llamado calentar motores. Hasta el 24 de diciembre tras la cena más buena del año no doy inicio al ritual de comer el primer turrón. Sí, lo sé, decidme raro. Tampoco soy de anticipar lo que se llama Christmas Song antes de tiempo. Hasta ahora me parece un mal momento para ponerme este tipo de cosas, hoy que hay que sumar doce días a estos doce. Pero las circunstancias mandan y obligan, más bien sugieren y me piden que hable de jazz y de navidad. ¿Ya llegó la navidad? Las fiestas que celebran hasta los que no creen y hasta la gente mala, que de Mr. Scrooges está llena la vida, tu vida, a que sí.
La vida no es un cuento de navidad, por lo que hay que hacer
un esfuerzo y recurrir a los manidos tópicos más típicos del 24 en adelante. Turrón,
zambomba (no conozco a nadie que tenga zambombas) y el belén. El árbol, ese
invento típicamente americano, el belén, typical spanish, que tienen en sus
casas hasta los que no creen o creen no creer. Poca diferencia entre lo que
cantamos aquí y lo que nos trajeron los americanos (¿a partir del plan
Marshall?). Bueno, sí, que aquí daban mamporros al pequeño tamborilero diciendo
que era una obra de arte, aquél que era con una ph en lugar de efe. Allí cantaba
Ella Fitzgerald, y Bing Crosby, y Mel Torme, y Louis cuando regresaba a casa (Nueva
Orleans) por navidad. Como que sabían lo que se hacían. Ahora la cosa ya es
otra. Diana Krall y tal. O ese ser llamado Michael Buble. Ventajistas. Puestos,
prefiero imaginar el villancico que nunca cantó Billie. Prefiero que Judy
Garland, que (se me acaba de ocurrir) era lo más parecido que hubo en el cine a
Billie, me recuerde de nuevo (no lo vemos, pero Judy sigue ahí cada año a la
espera de que alguien se acuerde de ella) unas merry little Christmas. Prefiero
que gente negra cante navidades blancas. Prefiero que llegue el día 24 para
empezar los rituales y acordarme de las dos o tres personas de las que me
acuerdo a partir del día de navidad.
A partir de ahí, a volar.
4 comentarios:
La navidad tan anticipada huele a precocidad.
De cualquier manera, la foto de Judy es muy buena, Jose.
Un beso. Y nada de feliz navidad. Not yet.
Precocidad ya desde el mes de noviembre, ciertamente. Creo que voy a aumentar el número de personas de las que acordarme.
Besos, Zoe.
Buenísima tu entrada, me hiciste volar y el videíto un lujo (es Ella, podría ser Mingus pero no estoy seguro, el batero parece Buddy, al trombón no sé, el trompeta parece Roy y el clarinete debería ser Benny. Feliz y anticipada navidad.
Gracias por tu comentario, Nico. La Verve, siempre a primer nivel con el jazz.
Un saludo.
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